En mi comunicación con ustedes hoy, Yo, el Arcángel Miguel, deseo compartir con ustedes algunos medios del Reino Angélico y mi propia energía que les estoy obsequiando para ayudar a su ascensión y empoderar su trayectoria actual en la Tierra. Los medios, técnicas y prácticas que deseo compartir con ustedes están enfocados en el mejoramiento de su trayectoria espiritual y física en la Tierra, al tiempo que reconocen que ambas son la misma. Su trayectoria espiritual y física están sintetizadas; no existen por separado, y no deben ser vistas como desconectadas una de la otra. Su vida física es el lienzo de su ser espiritual y alma para pintar y crear cualquier cosa que los inspire y satisfaga. Cuando ustedes viven únicamente en su realidad física y no involucran la presencia de su ser, entonces la vida se vuelve aburrida, mundana y retadora. Cuando involucran solamente a su yo y su senda espiritual y dan menos importancia a su realidad física, entonces pierden el propósito de su vida y son incapaces de ver la belleza de la Tierra. La realidad física y la realidad espiritual son una y la misma, y cuando son capaces de reconocer esto tienen acceso a la magia, propósito y satisfacción en la vida.
1a. Práctica: Reconocer la Separación de Su Realidad Física y Espiritual
Durante su día aliéntense a estar conscientes de cuándo piensan que su realidad física y espiritual son sendas separadas. Ejemplos son cuando ustedes creen que una acción física no involucra al Creador, tal como los quehaceres del hogar o los estudios educacionales. O cuando sienten que necesitan hacer un tiempo para meditar o necesitan estar en un lugar o cuarto especial para meditar. Integrando lo físico con lo espiritual pudiera ser el meditar en el tren, estando en fila, mientras caminan en el parque o haciendo los quehaceres del hogar. Otro ejemplo podría ser el sentirse culpables por no tener tiempo para sus prácticas espirituales; por lo tanto, piensan que la vida y las prácticas espirituales son algo separado.
Documenten todos los pensamientos y acciones que reconozcan como creando una separación entre su vida física y espiritual que hace que se reconozcan como dos seres separados viviendo en la Tierra en el mismo cuerpo.
Traten de integrar prácticas espirituales fáciles en su vida diaria, tales como el meditar, irradiar su vida, repetir afirmaciones, bajar luz, hacer peticiones a la Divinidad.
2a. Práctica: Reconozcan Su Divinidad
Se necesita reconocer que su cuerpo físico, su realidad física y vida en la Tierra son divinas y sagradas, creadas a partir del amor y la verdad del Creador. Cuando ustedes se permiten adoptar esta perspectiva empiezan a reconocer a su yo entero como un ser divino y una expresión del Creador. Por lo tanto, la manera como ustedes actúan y reaccionan transforma también su percepción del mundo a su alrededor. Si ustedes son una creación de la Divinidad nacidos del amor y la verdad, entonces ¿qué son todos los demás?
Cada mañana tómense un tiempo para honrar a la Divinidad de su cuerpo y todo lo que ustedes son de una manera que se sienta apropiada y sea significativa para ustedes. Tal vez deseen agradecerle o mostrarle gratitud. Otra manera es permitirse estar conscientes de todo su ser y su cuerpo; luego digan:
‘reconozco y honro la Divinidad de todo mi cuerpo y mi ser. Elijo empoderarla durante todo mi día. Yo soy la Divinidad del Creador encarnada y en movimiento.‘ |